Una mirada retrospectiva a uno de los mejores mastiffs de todos los tiempos.
Como nos dijo el Bardo, todo el mundo es un escenario. Y de vez en cuando, un personaje tan descomunal y fascinante lo atraviesa, dejando al público en un ataque de ovaciones, vitoreando y rogando por más.
Quizás más que cualquier otra raza Molosa, el Mastiff ha tenido una buena cantidad de hombres destacados. Y podría decirse que el más conocido de todos, al menos en la memoria moderna, fue el campeón británico Hollesley Medicine Man.
El juez de Molosos, reconocido internacionalmente, Christofer Habig de Alemania, quien le dio a Medicine Man su último certificado de campeón, no cree que sea una exageración llamarlo uno de los mejores mastiffs de todos los tiempos. “Medicine Man ya era una celebridad en su vida. Él fue el ‘constructor de marca’ para la raza Mastiff que anhelábamos en esos años», dice Habig, y señala que el perro era casi invencible durante su tiempo en el ring en la década de 1980: ganó el CC en Crufts cuatro veces consecutivas, rompiendo un récord que había durado casi un siglo. «La personalidad, la presencia, la fuerza y la resistencia del “medicine man”» comunicaron «como ningún otro mastiff en todo el mundo en ese momento». Y como cualquier gran «marca», continúa Habig, Medicine Man invitó a todo tipo de atribuciones fuertes y cargadas de emociones, «desde celta a majestuosa e impetuosa».
